CUANDO SALGAMOS DE ESTA


Cuando salgamos de esta quiero resolver todas mis dudas. Cuando salgamos de esta quiero dejar de tener miedo a decir las cosas. Quiero aprender a priorizarme, aunque sea solo un poquito, por encima de lo que vayan a pensar los demás. No apreciamos el tiempo que tenemos, y sí, yo ya me había propuesto esto, y estaba en ello, antes de que nos encerraran a cada uno en su casa sin pedirnos opinión. Pero es por el bien de todos, no? 

Cuando salgamos de esta quiero ir a cenar a la playa. Comerme esa pizza con piña que siempre hemos dicho de hacer, o cualquiera de las mil cosas que hay en la lista que hago antes de dormir. Pero también quiero dejar de temblar cuando hablo de como de mal he gestionado mi vida durante tanto tiempo. Cuando salgamos de esta, quiero abrazar a esa amiga que hace tanto que no veo, aunque viva tan cerca de mí. Y llorarle todos los mares, aunque me seque por dentro. Porque nunca quise perder a nadie. 

Cuando salgamos de esta quiero irme de voluntariado, o invertir mi tiempo en todo aquello que tan feliz sé que me hará, aunque aún no sepa lo que es. Quiero dejar de alejarme de la gente porque me recuerdan todos aquellos momentos borrosos de mi vida, o aceptar de una vez que no está mal tener más de un grupo de amigos. Quiero dejar de tener miedo a decir que no me gusta la casa en la que vivo, y que tengo unas ganas terribles de compartir un piso el año que viene. 

Cuando salgamos de esta quiero dejar de vivir entre fantasmas que tienen mi nombre y apellidos. Aceptar que, por mucho que me cueste, puedo estar orgullosa de la persona en la que me estoy convirtiendo, porque por una vez, soy quien quiero ser. Pero me duele muy dentro en el pecho pensar que pueda perder a la gente que me importa. Hay tantas veces que he pensado que lo único que necesitaba era estar lejos de todos para poder aclararme, que ahora que lo estoy, solo tengo claro que no puedo seguir así. Que aunque no debo, tengo unas ganas terribles de coger ese cercanías y plantarme en la estación que me ha visto pasar por todos los estados emocionales que hay. El tiempo se me pasa tan lento que no quiero que siga transcurriendo. Todos tenemos días malos, y se que en ellos no hay que escribir, pero las cosas más bonitas salen cuando las emociones están a flor de piel. 

Cuando salgamos de esta solo quiero volver a ser capaz de escribir. Pero lo tengo tan asociado al acto del desahogo, que me da miedo hacerlo. Lo hacía tan bien. Escribía las cosas más bonitas que se hayan podido plasmar, las leía hasta memorizarlas y, cuando no podía más, me las recitaba porque me recordaban lo bonito que es sentir. La vida brotaba de ellas como la primavera hace con las flores. Ahora solo tengo la sensación de que nunca podré volver a escribir aquellos textos, que eran los más bonitos de mi historia. 

Cuando salgamos de esta, nos prometemos que veremos la vida de un color distinto, pero muchas veces acabamos recayendo en la rutina que tanto odiamos. Mi vida tiene de todo menos un componente rutinario, porque no lo aguanto. Y de querer escapar de la monotonía, creo que he creado una propia. Tenemos siempre tanto que hacer que, cuando cae la noche, cuando el tiempo es nuestro, solo queremos descansar. Y así pasan los días, las semanas y los meses. Y sin verlo venir, otro año ha pasado, pensando que es el más increíble de nuestras vidas, buscando todo aquello que nos ha hecho feliz en contadas ocasiones. Pero en el fondo solo somos pequeños haces de luz que intentan destacar, entre tantos seres iguales. 

Por todo esto, cuando salgamos de esta, necesito hablar. Necesito las respuestas que me hacen avanzar. Quiero ir a la playa a escuchar música y sentirme tan viva como lo hice aquel miércoles, cuando la esperanza estaba perdida. Quiero tirar los mil carretes que ahora no puedo usar, y revolcarme en la arena junto al mar. Ojalá bañarme en aquella piscina otra noche, aunque no sea de verano, o ir a ese concierto al que tengo tantas ganas. Quiero dejar de tener esta horrible sensación de que no soy importante para las personas, o escuchar ese "te quiero" en el momento en el que tenga que llegar. Quiero tantas cosas que me conformo solo con una: quiero volver a ser feliz. 

2 comentaris :

  1. Esa es mi amiga. Increíblemente increíble ♥️

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  2. Et sorprendria lo identificat que em sentisc amb lo que has escrit. Lo que t'ix de la ploma, o en este cas del teclat, és pura màgia... de veres. Quan ixquem d'esta, crec que tots tornarem amb un altre focus cap a la vida, però en eixe moment de retrobar-nos, crec que mai una abraçada podria haver tingut tanta força.

    Se vegem al final de tot "astò".

    Urios

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